El Director del Centro de Investigaciones de la Universidad Iberoamericana (UNIBE) y Secretario General en la Republica Dominicana de Facultad Latino Americana de Ciencias Sociales (FLACSO) Dr. Wilfredo Lozano inauguro el ciclo de actividades que estará realizando el Centro de Análisis para Políticas Publicas al ofrecer la Conferencia Magistral “Cultura Política de la Democracia en República Dominicana” la cual se llevó a cabo con una casa llena en el Salón de Orientación de la Biblioteca Pedro Mir en la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Entre los invitados especiales estuvieron el reportero para CNN en Español Ismael Cala, el Diputado y Presidente de la Comisión de Juventud de la Cámara de Diputados Alexis Jiménez, el Presidente del Consejo Directivo del Parlamento Juvenil de la Republica Dominicana José Luis Rudy de los Santos, el Encargado de Negociación de Tratados Comerciales en el Ministerio de Relaciones Exteriores Dr. Cesar Dargam, el Coordinador General del movimiento Nueva Generación Reformista (NGR) Jorge Dargam, el Presidente del movimiento Acción Juvenil Rubén Martínez Portes así como un gran número de jóvenes de varias universidades.
Al hablar sobre el tema, Lozano al igual que el Lic. Bisonó quiso pintar un recuadro de lo que ha sido la América Latina republicana. Comenzó por hablar de la célebre “década perdida” de los ’80 la cual tristemente de manera irónica fue la que vio la democratización de la gran mayoría de nuestros países que estaban en regímenes de fuerza abiertos y maquillados hasta ese entonces. Puso énfasis en el rol que jugaron los partidos políticos en aquel periodo de transición a una vida pluralista. Tal fue el caso en nuestro país donde desde la muerte del Dictador Rafael Leónidas Trujillo los partidos aglutinaron a varios sectores y dieron lugar a un fenómeno que no se había visto nunca antes por estos lados. “En 1961, por primera vez se comenzó a hacer política de masas. Multitudinarias concentraciones donde cada grupo usaba la política para promover su agenda ideológica”. Tal práctica era inexistente anteriormente ya que al ser el nuestro un país agrícola y mayoritariamente rural en aquel entonces, no era fácil congregar tantas personas como se comenzó a ver con la llegada de la democracia.
En son de broma, hablo con los presentes sobre como los sociólogos a todo buscan ponerle nombre y/o apellido. En el pasado, existía el patrimonialismo que no es más que el clientelismo. Los “generales” compraban la lealtad de los aldeanos y así aseguraban su poderío. Los políticos y más aun con el logro de conseguir competencias esencialmente libres, compran votantes y así mantienen su permanencia en la política. A esto último, se le ha bautizado con el muy innovador nombre de “neo-patrimonialismo”.
Siguiendo este tema seriamente, toco el tema de como el nuestro, era un estado fuerte ya que en 31 años fue manejado de manera omnímoda por un sátrapa que todo lo quería para sí mismo. Luego de muerto este, aquellos bienes pasan a ser administrados por el estado y la lucha se da en torno a quien tendría control esto.
Esto dio lugar a que el conferencista llegara al tema de Joaquín Balaguer quien entre los ’60 y ’70 fue Presidente de la Republica en un periodo que coloquialmente es conocido como “los 12 años”. Lozano considero que el extinto líder al no tener una competencia unificada pudo lograr muchísimos avances y prosiguió a ponderar las leyes de Reforma Agraria promovidas por el gobierno de entonces a las cuales confeso haberse opuesto radicalmente en la UASD donde cursaba estudios para aquella época. “Ya disminuidas las pasiones, podemos concluir que estas, a pesar de no haber sido revolucionarias, eran beneficiosas para el país. No obstante, con una pobre estructura de apoyo y un sector latifundista poderoso, fracasaron”.
Con la alternancia pacifica a partir de 1978, el estado, debido a varios factores como la caída de los precios del azúcar así como el aumento del petróleo, vio caer su anterior fuerza mas no obstante, los Presidentes siguieron teniendo gran poder. Tal fue el caso con el PRD entre 1978 – 1982 y 1982 – 1986 encabezados por Don Antonio Guzmán y el Dr. Salvador Jorge Blanco respectivamente. Lo que ocurrió fue que también tomaron fuerza los grupos de intereses dentro de los mismos partidos. Quien más se vio afectado por esto fue el PRD mientras que Balaguer al ya no tener a las Fuerzas Armadas detrás, no estuvo a salvo de estos grupos en su Partido Reformista. Ya los partidos no solo competían unos con los otros si no que tenían competencias internas a veces tan apasionadas como las externas.
También, en los 90 surgió con fuerza en nuestra área el neo-liberalismo y según Lozano, el fundador del PRSC estaba opuesto a este por ser un tradicionalista pero termino dejando que nuestra economía se abriera y esto causo un gran cambio en la manera de hacer política ya que el sistema se reoriento. El estado ahora comenzó a recibir mucho más por razón de aduanas y fue así cambio la tradición de que los empresarios financiaban a los políticos ya que estos ahora, con el poder del estado adquirieron un muchísimo mayor poder sobre la actividad económica.
Concluyo diciendo a los presentes que nuestra cultura política ciertamente está viciada pero que ha habido grandes avances como el que ya muchos ciudadanos se han dado cuenta de que los partidos políticos no son el único medio de promover acción. Hoy día existen sindicatos, grupos juveniles, agrupaciones de la sociedad civil y demás que muchas veces son tan o incluso mucho más efectivos. Hoy día con la existencia de tantas redes sociales y mayor comunicación, no es necesaria la congregación de miles o discursos maratónicos. Las ideas se propagan mucho más rápido y llegan incluso más lejos.
Al final del evento, el Presidente del CAPP dio las gracias a Lozano por su contribución al CAPP en la promoción del análisis crítico asi como a todos por su presencia.
Discurso de Bienvenida del Lic. Víctor (Ito) Bisonó Haza. Presidente del CAPP.
Buenas tardes.
Gracias por atender la invitación.
Felicitaciones a Enmanuel Alcántara y Jatzel Román, por lograr esta importante participación de ustedes.
Al abrir la reunión, permítannos hacer un muy breve resumen del contexto en que nos juntamos.
El Centro de Análisis para Políticas Públicas (CAPP), cuya presidencia nos honra, es una entidad nacional que tiene como objetivo servir de plataforma e incentivo a trabajos y ensayos en todos los ámbitos del saber, multiplicador de las ciencias, la educación, así como el rescate de principios y valores éticos-morales, representatividad y defensa de la colectividad, promoción de trabajos comunitarios, y el empoderamiento de ciudadanos dominicanos y extranjeros de un desarrollo integral, humano, social y económico sostenido, procurando una mejor calidad de vida de todos los ciudadanos.
Como parte de nuestra misión, buscamos crear conciencia de la necesidad de participar decididamente en una sociedad que avanza vertiginosamente hacia un paradigma social de un mundo global, competitivo y tecnológico.
El tema de nuestra conferencia es “Cultura Política de la Democracia en la República Dominicana”. Una democracia que si analizamos en términos relativos, es todavía muy joven. Algo triste pero que no puede verse solo desde el punto de vista dominicano. Hay que mirar más allá del mar caribe con tal de comprender esto.
Hoy tenemos el lujo de contar con la participación del Dr. Wilfredo Lozano, a quien todos ustedes conocen y a quien agradezco su apoyo.
En los últimos 30 años nuestra República Dominicana ha tenido la dicha de lograr por primera vez en toda su historia algo que anhelaba desde las batallas independentistas. Me refiero desde luego a la democracia participativa. Este deseo se había visto mermado por golpes tras golpes que daban origen a guerras civiles, juntas militares y caudillos autoritarios enemigos de la libertad. Ninguno de nuestros países estuvo a salvo de esto. Desde los mas remotos como Guatemala con Lucas hasta los mas avanzados como Uruguay con Bordaberry y Argentina con Videla. Otros, bajo el disfraz de democracia como México, vieron establecerse una dictadura perfecta tal y como la describiera Vargas Llosa, en la que el régimen perduraba, más no las caras.
A partir de los 80 comenzaron los cambios. Llegaron los Alfonsín, Cerezo, Sanguinetti y Aylwin entre otros. En el 2000 vimos caer al PRI luego de siete décadas de poder hegemónico. Ahora bien, ¿Han significado estos cambios realmente la llegada de una cultura democrática a nuestra región? Dijo una vez Salinas de Gortari “El PRI es así porque México es así”. ¿Acaso estos cambios no son mas que cosméticos si partimos de la premisa que las cosas simplemente son así?
El mundo ha cambiado, América Latina y en el Caribe República Dominicana, no son ajenas a estos cambios. Los ciudadanos ya no aceptan imposiciones descaradas como antes lo hacían. Los partidos únicos son repudiados y las elecciones son vistas como gran necesidad por todos. Cierto es que la simple existencia de sistemas competitivos de elección no son mas que un paso en el largo camino a tomar para establecer la cultura democrática pero cierto también es que representa un importante paso. Hemos logrado la alternabilidad relativamente pacifica pero todavía falta el respeto de las reglas por parte de los protagonistas muchos de los cuales solo a regañadientes las cumplen, si acaso.
La cultura de la democracia se promueve con acciones de los protagonistas. Existe un pasado oscuro pero hay que luchar por que sea precisamente eso, un pasado. Los participantes en la política ya sea electiva o de ideas así como ministerial juegan un rol de primer lugar y en nuestras manos esta cambiar a la sociedad.
Es simple, pero recordemos que simple y fácil no son sinónimos. Hay que saber que quien intenta cambiar la sociedad es muchas veces apedreado simbólicamente por los ciudadanos que lo tachan con las descripciones más despectivas posibles. Pero la paciencia da a luz al éxito.
Desde el CAPP buscamos promover el debate de ideas serias para darle un espacio a todo aquel que quiere participar en la política pero que siente temor por los partidos políticos.
La política es demasiado importante para dejársela a los políticos y la democracia es un tesoro que todos nos merecemos. Los dejo con las legendarias palabras de nuestro Padre Fundador de la Patria, Juan Pablo Duarte y nuestra espada Restauradora del General Gregorio Luperón:
Juan Pablo Duarte
La Política.
“La política no es una especulación, es la ciencia más pura y más digna, después de la filosofía, de ocupar las inteligencias nobles”.
Gral. Gregorio Luperón
Democracia.
“La democracia tiene por ley la naturaleza; la libertad y la igualdad son derechos, y la fraternidad un deber”.
Gracias, nuevamente por venir y participar de esta iniciativa. De seguro que tendremos una magnifica experiencia con los aportes del panelista invitado, el Dr. Wilfredo Lozano.